viernes, 10 de octubre de 2014

Los padres y el WhatsApp, esa gran pareja


La mensajería instantánea ha revolucionado nuestra forma de vivir y de comunicarnos con nuestros contactos, ya sean familiares, amigos o conocidos. Una nueva manera de estar en línea con los demás y con lo que pasa a nuestro alrededor. En este sentido, lo que comenzó como una herramienta de mensajería instantánea para la gente joven es hoy día un instrumento indispensable para estar en onda con el mundo ¡y con tus padres!.

Como ya te hablamos del universo nombres de grupos de WhatsApp, hoy hemos querido recopilar algunas de las prácticas y pasos más comunes de los padres con esta herramienta de mensajería.

1. Primeros pasos. Hijo, ya tengo WhatsApp, ahora añádeme. ¿Me has añadido? ¿Cómo hago para que me salgas?

2. Sorpresa. Si vuestros padres son jóvenes puede que se salten este paso. Consiste en sorprenderse porque te mandan un mensaje y te dicen: ¿Ah, pero ya te ha llegado el mensaje?

3. Escribiendo. Las primeras tomas de contacto con WhatsApp y pone: escribiendo, escribiendo, escribiendo, escribiendo... para que luego te llegue ese mensaje tan elaborado que es: HOLA.

4. El estilo. ¿No os pasa que vuestros padres terminan de escribir lo que sea y todo lo acaban con un punto? Muchos otros adoptan una especie de estilo telegrama en plan: Hola. Qué haces. Cómo ha ido el día. Muy bien. Pues vale.

5. Controlar. Ahora que ya pilotan el WhatsApp empieza la aventura de quererte controlar en todo momento y para ello te delata tu última conexión: ¿Qué hacías conectado ayer a las 5 de la mañana si hoy tenías instituto? ¿Con quién chateas? ¿Con quién estás en la foto de perfil de WhatsApp? ¿De qué lo conoces? ¿Dónde es la foto? y otras preguntas absurdas que te fastidia contestar.



6. Cansinos históricos. Otra forma de controlarte consiste en llamarte y si no les coges el teléfono petarte el WhatsApp a mensajes: Hola, Te estoy llamando, hola?, hija? Contesta. Al final te encuentras con un montón de llamadas y no sé cuantos mensajes y te acojonas.

7. Emoticonos. Ese momento en el que los padres descubren el mundo Emoji y empiezan a querer ser los más modernos poniendo caritas después de cada palabra. Las que dan beso con corazón, las manos que saludan y las flamencas están en el top de sus favoritos.



8. Se pasan con los virales. Una vez que ya están en la zona de confort del WhatsApp y ya controlan la herramienta comienzan a caer en cadenas estúpidas del tipo "si no reenvías este mensaje a 10 contactos más tu vida será un infierno".

9. Poetas modernos. Gracias al WhatsApp nuestros padres se han convertido en unos verdaderos amantes de la poesía. Todo el mundo tiene un familiar que no para de mandarle fotografías con pequeños poemos al estilo: "Si lloras las lágrimas no te dejarán ver las estrellas".



10. Los valientes. Esos padres que se envalentonan con el WhatsApp y terminan abriéndose un Twitter.

¡Rúlalo por WhatsApp!

Fuentes: Los40.com