La cantante Katy Perry ha elegido Barcelona para iniciar su gira europea: “Prismatic World Tour”. La cantante de Santa Bárbara ha demostrado una vez más que es la reina del espectáculo.
Su
aparición entre fogonazos de colores danzantes, géiseres de humo,
guerreros fluorescentes y ella dentro de un inmenso prisma móvil de
luces cambiantes, no dejó a nadie indiferente. Más aún al ir todo
esto acompañado del ritmo atronador de su éxito “Roar” con el
que abrió la noche.
Katy
interpretó casi todas las canciones incluidas en su último álbum
“Prism”. Las cuatro primeras actuaciones fueron acompañadas de
un aire futurista que inundó todo el Palau Sant Jordi de Barcelona.
A esto le siguió el ambiente egipcio. La cantante apareció en el
escenario, para interpretar uno de sus mayores éxitos: “Dark
Horse”, a lomos de un gran caballo dorado y rodeada de bailarines
“egipcios” a la vez que se sucedían en las pantallas imágenes
de pirámides. Sin duda todo un espectáculo que el público
barcelonés no olvidará fácilmente.
El
colofón final del concierto vino de la mano de sus éxitos más
conocidos que, como empieza a ser habitual, cierra sus funciones.
La diva interpretó éxitos como: “Teenage dream”, “California
Gurls”
y “I
kissed a girl”, tema este último, en el que se la tragó el
escenario entre cañonazos de fuego.
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